Un vestidor no tiene por qué situarse en una habitación externa al dormitorio. Existen diferentes soluciones para instalar un espacio amplio que nos sirva para almacenar ropa y a la vez disfrutar de intimidad. Estas son algunas ideas para hacer un vestidor en dormitorio y disfrutar de un hueco en el que ordenar todo tipo de prendas.
En primer lugar hay que valorar si el dormitorio dispone de suficiente espacio. Si es así, se puede diseñar un espacio cerrado o un espacio abierto para el vestidor. Depende de las preferencias, un espacio cerrado ofrece más privacidad pero un espacio abierto ofrece disponer con mayor facilidad y de un vistazo de tu ropa y complementos. Marcar ese espacio puede diseñarse con sencillos biombos o cortinas, un armario amplio y estudiado o mediante reformas que dividan esos espacios. A veces un armario bien diseñado evita la realización de tabiques ya que el propio armario marca esa diferenciación de espacios.
Las puertas correderas son un recurso muy habitual para integrar el vestidor en la habitación. Es una solución que apenas ocupa espacio y da unos buenos resultados estéticos. Elegir unos buenos materiales y acabados marcan la verdadera diferencia entre una buena reforma y la que no lo es.
La iluminación. Iluminar correctamente es uno de los factores más determinantes para tener éxito en una reforma de vestidor. Añadir correctos puntos de luz tanto integrados en los propios cajones, estantes y espejos como en toda el área general del vestidor aportan un acabado profesional y funcional.
El orden y la organización. De nada serviría acometer una reforma para añadir un vestidor si no se afronta una clasificación y almacenamiento ordenado. Como recomienda la gurú del orden Marie Kondo, “la organización empieza por la eliminación”. De nada sirve llenar las zonas de almacenaje, tarde o temprano aparece el caos de nuevo.
Dependiendo de la arquitectura del dormitorio se pueden realizar diferentes alternativas:
Si la disposición de las puertas y las ventanas lo permiten el vestidor puede ir a un lado o detrás de la cama. Instalar un vestidor en la pared del cabecero de la cama dejando libre un pasillo es una buena alternativa. Otra opción es dividir el espacio en dos con un módulo de almacenaje completo.
Otra alternativa es utilizar una habitación contigua y transformarla en vestidor eliminando puertas y tabiques e integrando más espacio al dormitorio.
En ocasiones se utiliza el espacio de los pasillos que acceden al dormitorio para instalar armarios y módulos de almacenamiento, dependiendo de la anchura del pasillo podrá ir en ambas paredes o solo en una de ellas.
Lo importante, dadas las alternativas es acudir a profesionales. Metrocuadrado estudio puede aportar ideas y soluciones funcionales e interesantes para crear tu vestidor. Una visión de conjunto que estudie las reformas a emprender, materiales, acabados, iluminación y mobiliario todo en un conjunto que aporte armonía, modernidad y orden. Conocemos las tendencias y cómo aplicar al espacio la solución más adecuada.